Sin muertos ni heridos, sin
insultos ni ofensas, sin guerras de ninguna especie, ni sucias ni no sucias, en
declaraciones ante los medios de comunicación asistentes a la sesión solemne
del jueves 05 de julio en la Asamblea Nacional, anunciamos la separación de AD
de la MUD por las razones detalladamente expuestas en las respuestas que dimos
a las preguntas de los comunicadores allí presentes. El tema venía rodando
rumorosamente en algunos medios y uno de ellos en particular informó con
bastante precisión con datos de primera fuente. Imposible reproducir en el
limitado espacio de este artículo la cantidad de preguntas hechas y las
respuestas claras y a satisfacción de los formulantes, pero el evento íntegro,
a salvo de interpretaciones, puede verse y escucharse en los canales y páginas
del ciberespacio.
Ciertamente, hubo temas de interés sobre los que no hubo
preguntas pero resultaba imposible abarcarlos todos y será en los próximos días
cuando todas las interrogantes vayan paulatinamente despejándose. Creo que
hasta ahora lo más importante, tan importante como las razones mismas que
motivaron nuestra separación de la MUD o la permanencia en ella de otras
organizaciones, es que nadie se hubiese atribuido la responsabilidad en los
muchos éxitos y fracasos que como organización ha tenido la MUD desde su
constitución hasta esta fecha. Dicho lo mismo en otras palabras: todos, los que
permanecen en la MUD y quienes ya no estamos en ella, somos colectivamente
responsables de sus éxitos y fracasos.
Los temas determinantes de nuestro retiro, todos de la misma
importancia, fueron: La dificultad durante meses para designar el secretario
ejecutivo y consiguientes complicaciones por la omisión; el no
cumplimiento del acuerdo del 19 de julio de 2017 suscrito por todos los
partidos políticos y anunciado ante el país, que comprendía la escogencia del
candidato presidencial en primarias abiertas, la consagración de la no
reelección presidencial y el gobierno de unidad nacional sin exclusiones ni
sectarismos partidistas; nuestra gravísima falla comunicacional, tardía
en los tiempos y precaria en la forma, en el fondo y en las vocerías y la
permanencia de la dirigencia fundamental de la MUD en la capital sin
desplazamiento conjunto por todo el país en un programa sólido de información a
la ciudadanía muchas veces programado y nunca realizado.
Importante decir que por más que los especuladores de siempre
hablen de razones no reveladas detrás de la decisión, no hay tales secretos, ni
argumentos de fachada ni facturas engavetadas ni nada que se le parezca. Hay
que decir también que la fruta siempre trae el gusano: es destacable que
denostadores seculares de la MUD clamantes de su desaparición, que a cada
momento nos increpaban por nuestra presencia en ella, ahora nos insulten con
mayor encono porque los hemos complacido involuntariamente al retirarnos.
Mientras estuvimos nos acusaron de los peores delitos y de estar al servicio
del régimen y ahora nos acusan de lo mismo por retirarnos. Nada difícil ubicar
las razones del tufo. Hay opinantes asalariados muy bien remunerados en la
misma nómina que siempre atacan a los mismos y defienden a los mismos. Responden
al mismo negocio y son palafrenes de los mismos intereses.
No hay que alarmarse porque la MUD atraviese problemas
funcionales y operativos o porque en su seno se debatan agendas partidistas y
personales contrapuestas. Eso es natural aunque cueste entenderlo. Las
diferencias y discusiones -para repetirlo con un estrujado lugar común- existen
hasta en el seno de las familias y tanto más en organismos en los cuales
concurren personas e instituciones de naturaleza diversa. Que a pesar de ello
deban ser sólidamente unitarios los objetivos, estrategias, tácticas y
conductas es el deseo y el reclamo de todos y eso es lo que no hemos logrado.
Quienes estamos preocupados por el tema estamos obligados a explorar vías de
solución en vez de permanecer atrapados dentro del problema e inmovilizados en
su inercia. Y en cuanto a que la MUD es una especie de coto hermético e
impenetrable donde para empeorar la cerrazón los 4 principales partidos piensan
y deciden por todos, queda desmentido por el impulso de que la propia MUD dio
al Frente Amplio (ahora tan criticado como la MUD), para que se incorporaran al
tema de las políticas opositoras organizaciones no partidistas, universitarias,
estudiantiles, eclesiales, empresariales, laborales, comunicacionales e incluso
del denominado chavismo disidente. De nuestra parte, los adecos vamos a hacer
lo que siempre hemos hecho y sabemos hacer: recorrer el país palmo a palmo y
estrechar las relaciones con nuestro pueblo, escuchar sus reclamos, sus
críticas, sus consejos y convencerlo de que sí hay futuro. Lo demás es
agua de borrajas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario